Por ejemplo: ¿Cómo se prepara un laboratorio con acreditación ISO 17025 para la certificación de Buenas Prácticas de Laboratorio (GLP)?
Un detalle importante a considerar: cada sistema de gestión de la calidad tiene sus particularidades intrínsecas, unos objetivos que son distintos en cada caso y unos requisitos que también son diferentes.
Por ello, ante el reto de implementar un nuevo sistema de gestión de la calidad los clientes suelen preguntarnos: ¿Qué será mejor, que ambos sistemas coexistan de modo totalmente independiente, separando sus ámbitos de aplicación o por el contrario integrarlos en un único sistema capaz de responder adecuadamente a los requisitos de ambas normas?.
En AIFORT no tenemos duda. Claramente, optar por la integración constituye una estrategia de futuro ya que consigue desarrollar un sistema de gestión mucho más robusto, coherente y eficaz. En definitiva, hacer compatibles ambos sistemas para realizar una gestión integral de la calidad.
¿Mas fácil decirlo que hacerlo?.
Aunque, de entrada puede parecer complejo, conforme se avanza se empiezan a percibir las ventajas del modelo integrado. Hay que aprovechar al máximo todo el trabajo efectuado al implementar el primer sistema de gestión, construyendo una sólida base a partir de los requisitos comunes e implementando de manera progresiva las nuevas demandas hasta construir una estructura integrada que responda de manera eficaz a las demandas de ambos sistemas.
Evidentemente habrá que modificar algunos procedimientos y sistemáticas de trabajo, pero, como en las piezas de un puzzle, pronto se observa como los nuevos procesos encajan en la estructura y la consolidan.
¿Y cuanto dura el proceso?.
Evidentemente, esto depende de cada caso. La implicación del personal es clave para el éxito del proyecto. Pero es normal que se desee llevar a cabo la implantación del nuevo sistema sin interferir ni retrasar el trabajo habitual del laboratorio para no causar ningún perjuicio a los clientes. Con estos condicionantes, suele ser adecuado plantearlo como un objetivo a medio plazo (12 - 18 meses). También es positivo contar con ayuda externa experta, que con una dedicación parcial (aprox. 1-2 días por semana) refuerce la estructura interna y ayude a cumplir la planificación establecida.
¿Qué aporta AIFORT?
Ponemos a disposición de nuestros clientes toda la experiencia adquirida durante más de 15 años trabajando bajo sistemas de gestión de calidad y nos implicamos en el proyecto desde el inicio, normalmente dando soporte al Departamento de Garantía de Calidad de la empresa y colaborando en:
- La revisión inicial del sistema, en la determinación de los puntos fuertes y débiles y en la planificación de las actividades a realizar.
- La redacción e implementación de los nuevos procedimientos y de las versiones actualizadas de los procedimientos ya existentes.
- La formación del personal en los nuevos procedimientos y actividades.
- Las auditorias internas y en los planes de acciones correctoras y de mejora.
- La preparación de la auditoria de certificación.
Los conocimientos y la dedicación aportados por AIFORT están contribuyendo al desarrollo exitoso de varios proyectos
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